- Quiero verla y voy solita, ¿te quieres venir Anita?
- ¿Pero de que va?...
Pues básicamente es un desfase de obra. Lo cual me encantó. De hecho, yo metería mucha mas locura. Y es que esta obra va de locos (o no). Nos remontamos a la revolución francesa, finales de 1700 (89), cuando la gente llevaba pololos y los ricos pelucas blancas. Resulta que en esa época, los libros de historia hablan de dos persona(je)s: un tal Marat, girnondino revolucionario a favor de su pueblo y los ideales de la ferviente revuelta que era un plumilla y escribia mucho al respecto. Sí, es el del cuadro :
Y por otro lado a un señor de bien, el Marques de Sade que ya desde pequeño denotaba ciertos "problemillas" de "incomprensión" que le siguieron a lo largo de la vida... la palabra sádico viene en su honor.
Lo que hace el señor Peter Weiss (el que hizo la obra hace ya años) es hacer una obra de una obra. La obra principal es la "persecución y muerte de Marat", hecha en un sanatorio mental donde casualmente estaba Sade, que ayudaba a dirigir los as obras que allí se hacian (era una terapia). Y nosotros estamos viendo Marat-Sade que es todo eso en un pack teatral de interesante resultado entremezclando teatro con mucho teatro y salpicando confusión clara.
Primero de todo aviso a navegantes: sí, alguien se puede sentir ofendido porque no dejan titere con cabeza, como buenos "revolucionarios franceses" (y si no que se lo pregunten a Maria Antonieta). Pero por otra parte eso es lo bueno: no deja indiferente a nadie y arriesga tanto en ciertos textos, en las puestas en escena y sobre con los actores, que con la tontería de que estan locos y hacen lo que quieren, te acabas asustando un poco por si se te tiran a la yugular con un trapo blanco en la cabeza.
Yo hubiera metido menos cancioncitas y mas expresión corporal. Pero la compañia era Animalario y no La Fura dels Baus, asi que no no estuvo nada mal así. Los actores, muy creíbles (o los locos, muy actores, ya no sé). Lo que no acabé de pillar bien es el punto revolucionario de Sade... mira que busque e intuí cierto individualismo en su postura frente al colectivismo de Marat... la revolucion interior frente a la exterior... incluso deberia de haberme identificado con el en ese sentido... pero aun asi habia algo que no me cuadraba en Sade...
Nota: la de nuestro asiento de al lado se largó en el descanso y los últimos 10 minutos (que tela) la gente se iba en estampida con cara de resignación. Eso si, los que nos quedamos, un poco mas de la mitad, aplaudimos pero bien.
Información seria por aquÍ
VALORACIóN: 7'782
- Ah, entocnes si vamos- dijo Anita en la cafetería de la universidad...
